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Las Guerras Napoleónicas

Capítulo XVI

Enero a diciembre de 1812

 

Índice de épocas y temas, todo disponible en esta página:

Guerra de Independencia española (V): 1812

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Las Guerras Napoleónicas: Capítulo XVI.

 Guerra de Independencia Española (V): 1812

1812

 

  5 enero 1812: 

Defensa de Tarifa.

La ciudad de Tarifa está situada entre Gibraltar, puerto británico, y Cádiz bajo asedio francés desde hace casi dos años, por lo que el mariscal Soult encomienda al general Laval su conquista para rendir antes la plaza sitiada, presentándose este ante la villa el 19 de diciembre, con 10.000 soldados, que hacen trincheras y emplazan baterías.

Tarifa es defendida por el general Francisco de Copons y el coronel Skerret, al mando de de los aliados británicos, y cuenta con un total de 2.500 hombres como guarnición, pero sus muros son antiguos y poco sólidos, por lo cual hacen zanjas en las calles y abren aspilleras en los muros de las casas.

Los cañones franceses abren fuego la mañana del 29 de diciembre, haciendo a las pocas horas una brecha en los débiles muros y derruyendo un torreón. Laval intima entonces a la rendición, pero negándose Copons y ordenando este taponar la brecha con colchones y otros enseres, unas 23 compañías de granaderos y cazadores franceses comienzan el asalto de la brecha a las 09:00 horas del día 31.

Las tropas de los regimientos de Irlanda y Cantabria rechazan el asalto con descargas cerradas de fusilería, debiendo los franceses retirarse. Tras un armisticio que los españoles concedieron para recoger a sus muertos y heridos, comienza a llover, quedando anegadas las trincheras francesas y hundida toda su artillería pesada.

Hoy el general Laval opta por retirarse, tras haber sufrido 2.000 bajas, dejando atrás las piezas que no ha podido remover del fango y sus municiones.

 8 enero 1812: Comienza el II y último Sitio de Ciudad Rodrigo.

 9 enero 1812: 

Toma de Valencia.

El mariscal francés Suchet inicia las operaciones para cercar Valencia poco después de tomar Sagunto, llegando con un pequeño ejército a la ribera occidental del Guadalaviar el pasado mes de noviembre. En la otra orilla, el general español Blake tenía a sus 18.000 hombres atrincherados con el propósito de impedirle cruzar

El 26 de diciembre Suchet recibe refuerzos hasta contar con 35.000 soldados, y con ellos cruza el río por Ribarroja, atacando la izquierda española, que tras una escasa resistencia es rebasada, resultando envueltas las tropas de Blake. Por la noche Valencia queda rodeada.

Blake intenta sacar del cerco a sus tropas la noche del 28 de diciembre por el Puente de San José, pero sólo consiguen pasar las líneas francesas unos 400 españoles, el resto del ejército hispano se repliega alrededor de Valencia. 

El 2 de enero los franceses ya han cavado tres líneas de trincheras, frente al baluarte de Monte Olivete, el hornabeque de San Vicente y otra en la villa de Cuarte. Blake ordena a sus tropas encerrarse dentro de Valencia la madrugada del 5 de enero; las posiciones que abandonan son ocupadas por los invasores.

Suchet ordena bombardear la plaza la tarde del 5 de enero, causando grandes daños de inmediato, pues los valencianos no habían hecho preparativos. Al día siguiente el mariscal insta a los ciudadanos a rendirse, propuesta que Blake rechaza. 

Hoy los franceses avanzan hasta ocupar los arrabales de Ruzafa, el hornabeque de San Vicente, defendido por el general Zayas con determinación, y Cuarte; además los sitiadores toman otros puntos estratégicos, como el convento de Santa Ursula. Como la defensa ante un asalto es insostenible, Blake decide capitular.

Todo el ejército del general Blake es apresado: 15.200 infantes, 1.400 jinetes, 900 oficiales, 400 artilleros, 240 ingenieros y 23 generales; además de 22 banderas y los 400 cañones del ejército y de la plaza. Ha sido una de las peores derrotas españolas de la Guerra de Independencia. Suchet entrará en Valencia al día siguiente.

19 enero 1812: 

Reconquista de Ciudad Rodrigo.

Los británicos y sus aliados portugueses pretenden pasar a la ofensiva contra los franceses que ocupan España, teniendo como su primer objetivo las estratégicas plazas de Badajoz y Ciudad Rodrigo, para después continuar la campaña en la Península Ibérica entrando por el valle del Duero desde sus bases en Portugal.

El 8 de enero, Arthur Wellesley, Vizconde de Wellington, al mando de 10.700 soldados angloportugueses inicia el asalto de la plaza fuerte salmantina, guarnecida por 3.700 franceses al mando del general Barrié, que han reconstruido y reforzado las fortificaciones notablemente tras conquistarla en el anterior sitio.

Ya el mismo día, ante el temor de la llegada de refuerzos a la plaza enviados por Marmont, Wellington ordena un arriesgado asalto de infantería. Por la noche, los aliados toman el reducto Renaud, en el Cerro de San Francisco. 

El día 13 los aliados lanzan otro asalto, tomando el convento fortificado de Santa Cruz, y el de San Francisco ya en la madrugada del día posterior. Wellington ordena comenzar a cavar tres trincheras paralelas a las fortificaciones de la ciudad y emplazar otras tantas baterías, cada una de 11 piezas de artillería.

El día 14 de enero los cañones aliados comienzan a bombardear Ciudad Rodrigo con la primera batería, y en la jornada del 19 abre fuego la segunda batería, abriendo dos brechas en los muros; hasta entonces el cañoneo fue poco eficaz contra ellos.

Al caer la noche, los aliados comienzan el asalto, ordenados en columnas: 3 al mando del general Picton, que atacan la brecha de mayor tamaño, otra, al mando del general Crawfurd, ataca la menor abertura, y la restante realiza una maniobra de distracción. Tras media hora de combate, los aliados se adueñan de Ciudad Rodrigo.

Es una dura victoria para los aliados, que sufren 1.300 bajas, de los cuales murieron 689 soldados, 68 oficiales y dos generales: Makinson y el veterano Crawfurd. Los franceses tuvieron  2.000 muertes; los otros 1.700 soldados se rindieron. 

En un futuro las Cortes españolas agradecerán a al Vizconde de Wellington la reconquista de esta plaza otorgándole el título de Marqués de Ciudad Rodrigo.

24 enero 1812: Combate de Altafulla.

 1 febrero 1812: Combate de Las Poblaciones.

 2 febrero 1812: Capitulación de Peñíscola.

 7 febrero 1812:

Combate de Rebollar de Sigüenza.

La partida de El Empecinado, célebre caudillo guerrillero, es sorprendida por las tropas del general francés Gui, debido a la delación del El Manco, lugarteniente del anterior. Los hispanos pierden 1.200 hombres esta jornada, aunque el líder guerrillero logra escapar. El traidor llegará a reclutar una cuadrilla contra El Empecinado; pero la mayoría de sus miembros desertarán para unirse a él, más famoso ya que cualquier otro comandante del ejército regular español: el pueblo le admira.

27 febrero 1812: Combate de Massanet de Cabrenys.

16 marzo 1812: Comienza el IV y último Sitio de Badajoz.

18 marzo 1812: Reconquista de Soria.

 4 abril 1812: 

Bando contra la Deserción de Josefinos.

La Gaceta de Madrid publica hoy un bando firmado por el actual rey de España, José I Bonaparte, dando a conocer las nuevas normas para los Consejos de Guerra de sus ejércitos en los casos de deserción. Entre otras disposiciones, el artículo 30º establece que "...el militar o dependiente del Ejército que se pase al enemigo, sin autorización de sus jefes por escrito, sufrirá la pena de ser pasado por las armas..."

Desde la invasión francesa en 1808 y el comienzo de la ocupación, muchos españoles habían sido capturados en combate y encarcelados, poniéndoles sus carceleros en la disyuntiva de, o bien ser deportados a prisiones en Francia, o alistarse en los ejércitos del monarca intruso. La mayoría de los cautivos hispanos se pasa a las filas del rey José, pues muchas veces la otra alternativa es en realidad el fusilamiento sumarísimo.

Estas tropas, llamadas "Josefinos" por luchar para el rey José, son muy desleales, y desertan para unirse a los ejércitos regulares españoles o a las partidas guerrilleras en cuanto tienen ocasión. Sin embargo, para sus compatriotas, que luchan por la causa del exiliado Fernando VII y expulsar a los "Gabachos" de España, todos los Josefinos o afrancesados Jurados son traidores; y cuando les apresan, les suelen dar muerte.

Así pues, los españoles que son detenidos por los franceses tienen poca esperanza de vida. Sensible a esta situación, el jefe guerrillero Juan Martín "El Empecinado", se atreverá a escribir al Duque de Mahón, gobernador de Cuenca, para tratar de romper el círculo vicioso que sufren los reclutados por la fuerza; en vano. Durante un tiempo, sus hombres continuarán sin dar cuartel a los Josefinos o Jurados que capturen.

 6 abril 1812: 

Reconquista de Badajoz.

El Vizconde de Wellington prosigue su campaña peninsular contra los franceses marchando a sitiar Badajoz, ante la que llega el 16 de marzo, al mando de 15.000 solados aliados, tras cruzar el Guadiana con un puente de barcazas. Llevan con ellos 3.000 aperos de zapa y asalto, 80.000 sacos terreros, 1.200 cestones y 700 faginas.

La plaza está ocupada por el general Philippon, al mando de 5.000 franceses, que habían hecho acopio de víveres para un mes y medio, pero escasean de municiones. Sin embargo han reparado los destrozos de las fortificaciones causados durante los anteriores sitios, reforzándolas y construyendo más obras de defensa.

Los británicos deciden atacar a los baluartes de Trinidad y Santa María, comenzando el día siguiente a cavar trincheras frente al reducto de Picuriña. El día 19, unos 1.200 franceses hacen una salida que daña los trabajos de atrincheramiento. Al dia posterior una crecida del Guadiana, inunda las zanjas, arrastrando el puente de barcazas.

El día 25 de marzo los aliados han logrado emplazar 28 piezas de artillería pesada en 6 baterías, que comienzan a bombardear al anochecer, acción secundada por un asalto de infantería, con el que los aliados logran tomar el reducto de Picuriña, desde el cual la artillería angloportuguesa puede batir el resto de las defensas.

Los aliados emplazan otra batería, dirigiendo su bombardeo contra los baluartes de la Trinidad, el de Santa María y el muro entre este y el de San Pedro, logrando abrir una brecha en cada uno de los objetivos mencionados, mientras preparan un asalto contra el rabellín de San Roque, pero este es infructuoso al inundar los franceses la zona.

Wellington es informado de que se acerca el ejército francés del mariscal Soult, y ordena iniciar el asalto. La noche del hoy los aliados atacan las brechas de los baluartes de Trinidad y Santa María, ordenados en 2 divisiones, mientras otra fuerza escala el baluarte de San Vicente y otra división marcha contra el castillo de Badajoz.

Los franceses realizan descargas cerradas de fusilería, fuego de metralla, y hacen estallar bombas enterradas en el foso, mientras arrojan barriles incendiarios y piedras. Muchos de los atacantes se ahogan en una zanja oculta excavada en el fondo del foso; para terminar retirándose con muchísimas bajas.

Un segundo asalto, termina ante los obstáculos contra caballería, unas vigas erizadas de filos que empalan a muchos soldados de vanguardia por su apretada formación, deteniendo el ímpetu de su acometida, y los de atrás retroceden por segunda vez.

Durante las siguientes dos horas, las tropas angloportuguesas partícipes en los asaltos a las brechas de los baluartes de la Trinidad y de Santa María se quedan inmóviles por el miedo, sin replegarse a sus trincheras ni avanzar, siendo masacradas por el bombardeo de la artillería y los disparos de fusiles franceses.

En los otros frentes de ataque los aliados toman el castillo y escalan el baluarte de San Vicente, barriendo a sable y bayoneta los parapetos y baluartes contiguos, cogiendo a muchos defensores por la espalda. Philippon ordena a sus tropas abandonar las brechas y refugiarse en el fuerte de San Cristóbal, donde a las 06:00 horas capitulan. 

Los franceses han sufrido 1.300 bajas entre muertos y heridos, el resto, 3.700 son apresados; los españoles traidores hallados entre ellos serán fusilados por guerrilleros. Los aliados tienen 4.100 bajas, de los cuales unos 3.500 caerían durante los asaltos a las brechas y otros 2.000 durante el bombardeo posterior.

La ciudad de Badajoz, la más sitiada durante la Guerra de la Independencia Española, padece también su más cruel saqueo por los soldados aliados, sus oficiales no pueden contenerles: al hallarse muchos ebrios, disparan a cualquiera para robarles el botín, hasta el mismo Vizconde de Wellington es amenazado.  

Los desórdenes terminan el día 9 de abril. Los bienes saqueados serán puestos en un mercado. Este episodio será también duramente criticado en Inglaterra, como vergonzoso, aunque las Cortes españolas agradecerán al Vizconde de Wellington la reconquista de Badajoz, otorgándole la Gran Cruz de San Fernando.

 9 abril 1812:

Combate de Arlabán

El caudillo guerrillero Francisco Espoz y Mina es informado de que se dirige a Francia un convoy con prisioneros españoles y objetos de valor, escoltado por 2.000 franceses. Al mando de su partida y con la de Gregorio Cruchaga, realiza una rápida marcha y lo embosca en el pueblo de Arlabán, sorprendiendo por completo a los galos, que le creían en el alto Aragón. La retaguardia de la columna francesa huye al castillo de la villa. Los demás, unos 600, se rinden; se desconoce el número de muertos y heridos. El valioso botín es apresado y los prisioneros liberados.

11 abril 1812: Combate de Villagarcía.

14 abril 1812: Incursión francesa en Guarda.

18 mayo 1812: Combate del Puente de Almaraz.

28 mayo 1812: Combate de Tudela.

 1 junio 1812: 

II Combate de Bornos o Guadalete

El mariscal Soult, comandante en jefe del ejército francés de Andalucía, decide fortificar Bornos, para mejorar la ruta de suministros entre Sevilla y las tropas que se hayan sitiando Cádiz, enviando allí al general Corroux con 4.500 soldados. Enterados los españoles del plan, el general Ballesteros sale de Gibraltar al mando de una fuerza similar, vadea el río Guadalete y ataca a los franceses acantonados ya en la villa.

Tras un éxito inicial español, Corroux responde intentando envolver a los hispanos por su flanco izquierdo. Algunos novatos huyen en desbandada al ver llegar la caballería francesa, lo que motiva el desorden de toda la formación de Ballesteros. El resto de regimientos huyen, mientras otros se retiran en buen orden, protegiéndoles; lo cual no evita que al final del día los hispanos cuenten unas 1.500 bajas.

11 junio 1812: Combate de Maguilla.

15 a 18 junio 1812: II Sistio de Astorga, por tropas españolas de Santocildes.

17 a 27 junio 1812: Wellington sitia los fuertes de Salamanca.

21 junio 1812: Tropas británicas de Pohpan entran en Lequeito.

 7 julio 1812: Tropas británicas de Cotton entran en Castro.

18 julio 1812: Combates de Castrejón y Castrillo.

21 julio 1812:

I Batalla de Castalla.

El general español O'Donell y el Vizconde de Wellington disponen que una flotilla de buques angloespañoles anclen ante Denia y Cullera, en Valencia, como protección al desembarco de un contingente anglosiciliano procedente de Palermo, y como señuelo para atraer tropas francesas y encubrir el ataque principal español contra ellas.

El Mariscal Suchet, informado del eventual desembarco aliado, envía a la zona desde Alcoy a 2 regimientos y 2 brigadas de la división del general Harispe, 4.000 hombres, desplegándoles entre Ibi, Castalla, donde acampa el general Delort, Onil, y Blair.

La mañana del 21 de julio, O'Donell emplaza sus 11.000 soldados entre Ibi y Jijona, en su flanco derecho, pasando por Castalla en su centro, hasta Petrel, en su derecha. La reserva la situó en Venta de Tibi, y la caballería, en Villena.

Los españoles atacan a la brigada francesa acantonada en Ibi, luego tropas del centro y la izquierda hispanas atacan al regimiento del general Delort en Castalla, en el centro del despliegue francés, expulsándole del pueblo y ocupándolo, mientras las tropas galas se reagrupan y su caballería venida de Onil y Blair se oculta en unos olivares.

El regimiento de dragones franceses emboscado en el olivar asalta por sorpresa a las fuerzas de O'Donell en avance, atacando cerca de Castalla al cuerpo central por el flanco de su marcha, haciéndole huir en desbandada, evitando tan sólo una masacre la intervención de las tropas de reserva; pero los franceses cogen a muchos prisioneros.

La brigada francesa desalojada de Ibi vuelve a contraatacar el pueblo, aunque los españoles alli atrincherados resisten. Finalmente, el general Harispe parte de Alcoy reagrupando a los franceses, replegándose a Alicante, tras perder 800 soldados entre muertos o heridos, y otros 2.800 prisioneros, junto a 2 cañones y 3 banderas. 

Las bajas hispanas se cifran en unos 1.000 muertos o heridos y 2.130 prisioneros, inadmisibles dada la superioridad inicial española. El general O'Donell será culpado del desastre por no esperar el desembarco de la división aliada, y también será acusado de haberse ausentado del campo de batalla en los momentos más difíciles.

22 julio 1812: 

Batalla de Arapiles o de Salamanca.

Arthur Wellesley, Vizconde de Wellington, decide reanudar las operaciones ofensivas aliadas en España con el objetivo de liberar Madrid, al percatarse de que Napoleón ha sacado tropas francesas de la Península Ibérica, como la Guardia Imperial y los Lanceros polacos, para unirlas a la Grande Armée de su campaña de Rusia. 

El 12 de junio, los aliados salen de Fuenteguinaldo y marchan hacia Salamanca, en tres columnas. El ejército aliado lo forman 30.500 ingleses, 18.000 portugueses del general Beresford, y 3.300 españoles de Carlos de España, entre ellos los lanceros de" El Charro", sumando unos 47.800 infantes, 3.200 jinetes y 40 cañones.

El ejército francés de Portugal, al mando del Mariscal Marmont, Duque de Ragusa,  está acantonado Salamanca, con unos 37.000 soldados. Al ser informado del avance aliado, sale hacia Toro el día 16 de junio, dejando atrás 800 hombres en los conventos fortificados de San Cayetano, Merced y San Vicente. 

Los aliados se atrincheran en San Cristóbal y atacan el 17 de junio a las fortificaciones salmantinas bombardeándolas con artillería pesada traída de Almeida. El de Cayetano y la Merced son asaltados y tomados por la infantería; y el de San Vicente se rinde. 

Marmont decide volver a Salamanca cuando ya es demasiado tarde, y los ingleses le obligan a replegarse de nuevo a Toro y Tordesillas. Los franceses, en la margen izquierda del Duero, reciben refuerzos del ejército de Asturias, pasando a sumar  los efectivos del ejército de Portugal unos 47.600 infantes, 3.400 jinetes y 78 cañones.

Durante las semanas siguientes ambos ejércitos realizan varias marchas entre Toro y Tordesillas, y por esta localidad cruzan los franceses el Duero la noche del 17 de julio, y el 20 llegan al río Guareña, a la izquierda del despliegue aliado, obligando a Wellington a reordenar sus posiciones y replegarse a San Cristobal al día siguiente; los franceses avanzan cruzando el río Tormes entre Alba y Huerta.

Wellington despliega sus tropas en el cerro pequeño de Arapiles a su izquierda, hasta Santa Marta a su derecha, con vanguardia en Calvarrasa de Abajo y la retaguardia cubriendo el camino de Ciudad Rodrigo; su cuartel general está en el mismo pueblo de Arapiles. Marmont sitúa sus tropas ante el Arapil pequeño, ocupando Calvarrasa de Arriba, el monte de Nuestra Señora de la Peña y el cerro Arapil grande.

A las 14:00 horas del 22 de junio, Marmont ordena a los generales Thomieres y Macune avanzar desde el Arapil Grande hacia su izquierda, para flanquear a los ingleses por su derecha y cortarles la ruta de huída. A las 10:00 horas Wellington dispuso preparar la marcha hacia Ciudad Rodrigo, pero se percata de que la división de Thomieres se aleja demasiado hacia el oeste de la división de Macune.

A las 15:30 horas, Wellington ordena a la 3ª división de infantería y a la brigada de caballería de D'Urban atacar la izquierda enemiga para envolverla por el arroyo Zuguén. Marmont dispone que la caballería de Curto acuda a defenderles, siendo arrollada por la carga británica, dejando expuesta a la división de Thomieres, batida unos 40 minutos después, desbandándose y siendo perseguida por los jinetes ingleses.

Hacia las 16:00 horas, Wellington ordena a la 4ª y 5ª divisiones de infantería y dos brigadas de caballería portuguesa atacar a la división de Macune y a la de Claussel, esta en el Arapil Grande, en en centro francés. Macune ordena a sus tropas formar en cuadros y repelen los asaltos de la infantería, pero una carga de los dragones pesados de Le Marchand rompe sus líneas hacia las 16:45 horas, obligándole a replegarse.

La división de Claussel detiene en el Arapil Grande el ataque de la 4ª división inglesa del general Cole con un nutrido fuego, hacia las 16:30 horas. Rechaza a la caballería inglesa e inicia un contraataque hacia el Arapil pequeño, contenido por la 6ª división de Clinton. Los franceses retroceden hacia las 17:30 horas, convergiendo los aliados en avance hacia donde se agrupan restos de las unidades de Thomieres y Macunne.

Marmont resulta herido en el brazo y el costado derecho, sucediéndole el general Bonnet, pero este también es alcanzado, quedando el ejército francés de Portugal unos 20 minutos sin ningún liderazgo, hasta que asume el mando el general Claussel. Para entonces, hacia las 18:00 horas, la 1ª división inglesa de Campbell asalta el Arapil Grande; la división francesa del general Foy que la defendía se retira.

Acosado, sin centro ni flanco izquierdo, Claussel ordena retirada hacia las 19:00 horas, replegándose su ejército en buen orden, protegido por lo que queda de su ala derecha. Los franceses son perseguidos por la caballería aliada hasta Peñaranda, los ingleses recriminarán a los españoles el no haber cortado la retirada francesa en el puente de Alba de Tormes; de haberlo hecho, la derrota enemiga sería absoluta.

Los franceses tienen 7.000 bajas, siendo muertos los generales Ferey, que con su división protegía el repliegue francés, Thomieres y Desgraviers, otros 7.000 más son apresados, incautándoles 20 cañones y 9 banderas. Los aliados sufren 4.700 bajas, entre sus muertos se halla el general Le Marchant, inventor del temible sable de la caballería inglesa, muerto al frente de una carga.

Por esta crucial victoria, una de las más importantes de las Guerras Napoleónicas, Wellesley será condecorado con la Orden del Toisón de Oro por la Regencia española y ascendido a Marqués de Wellington por la corte británica. Esta derrota significará para Soult la retirada de su ejército francés de Andalucía. El mismo rey José, que acudía a reforzar a Marmont con 10.000 soldados, se repliega a Madrid. 

 Batalla de Los Arapiles

Batalla de Los Arapiles ( 1812 )

23 julio 1812: 

Combate de García Hernández.

El general Bock, con tan sólo cuatro escuadrones de caballería, unos 450 jinetes, ataca a tres batallones franceses al mando del general Foy, que se repliegan del campo de batalla de Arapiles. Estos forman en cuadro, pero es roto por la impetuosa carga alemana; siendo muchos acuchillados. Los germanos sufren 150 bajas, por 1.400 de los franceses; una de las acciones de caballería más desproporcionadas de la historia.

24 julio 1812: La Grande Armée invade Rusia.

* Consultar Invasión de Rusia.

11 agosto 1812: Combate de Majadahonda.

12 agosto 1812: 

Arthur Wellesley en Madrid.

Tras la batalla de Arapiles, queda abierto el camino a Madrid de los aliados del Vizconde de Wellington, y las líneas de comunicación entre las tropas francesas acantonadas en el norte y el suroeste español quedan amenazadas, por lo cual Soult decide evacuar sus fuerzas de Andalucía y replegarse hacia el noreste; Castilla y León será también desguarnecidas.

El rey José Bonaparte, que acudía a ayudar a Marmont en Arapiles por el puerto de Guadarrama, debió volverse después Madrid, al ser informado del rápido avance aliado, pues el día 30 de julio Wellington entra en Valladolid, el 1 de agosto llega a Cuellar, y el 6 de agosto su vanguardia ya persigue la retirada de las tropas del rey por Segovia y los puertos de Guadarrama y Navacerrada hasta Madrid.

El 11 de agosto el rey francés se ve obligado por segunda a salir de la ciudad dejando una guarnición de 2.500 hombres en El Retiro para estorbar la persecución aliada. 

A las 10:00 horas de hoy, los aliados entran en la capital por la puerta de San Vicente, llegando en primer lugar los guerrilleros Juan Martín, "El Empecinado" y Don Juan Palarea, "El Médico", seguidos al breve del Vizconde de Wellington, vitoreados con gran júbilo por los eufóricos madrileños.

El 13 de agosto los aliados atacan el Retiro, cuya guarnición al mando del coronel Lefond se rinde el día posterior, siendo apresadas sus tropas, entregando sus fusiles, 189 piezas de artillería, provisiones y demás equipos. José se replegará por el Tajo hasta Valencia, donde llegará el 31 de agosto.

13 a 29 agosto 1812: Tropas españolas de Mendizábal entran temporalmente en Bilbao.

14 agosto 1812: Tropas francesas ocupan Valladolid

16 agosto 1812: En Guadalajara se rinden 800 suizos a Juan Martín "El Empecinado"

18 agosto 1812: Arthur Wellesley obtiene el título de Marqués de Wellington.

18 agosto 1812: En Astorga se rinden 1.200 franceses al coronel español Eurile.

25 agosto 1812: 

Fin del Sitio de Cádiz.

Con unas fortificaciones excepcionalmente bien planificadas, la guarnición de la ciudad portuaria gaditana era en febrero de 1810 de 2.000 soldados, pero rápidamente fue reforzada por el duque de Albequerque con 10.000 hombres más, que trabajaron mejorando sus defensas, hasta convertir la plaza en un bastión impenetrable para los 60.000 franceses del mariscal Víctor que la sitian desde el 6 de febrero de ese año.

A la Isla del León es donde se retiró la Junta Suprema de España e Indias al avanzar los franceses sobre Sevilla pocos días antes de llegar ante Cádiz, y es también aquí donde el 19 de marzo se proclama la primera Constitución liberal española, "La Pepa", que supone el fin del absolutismo del Antiguo Régimen en España. En su puerto hay una escuadra británica, y 5.000 ingleses están con la guarnición española.

El pasado enero los franceses trataron de tomar Tarifa para rendir antes la capital, sin éxito. El 22 de marzo una columna francesa abandona las trincheras y se encamina al Puerto de Santa Maria, iniciando el repliegue francés. Tras la importante victoria del Vizconde de Wellington en Arapiles el pasado 22 julio, hoy el mariscal Víctor decide retirar el resto de sus tropas antes de que los aliados le cerquen. 

27 agosto 1812: Tropas españolas liberan Sevilla.

29 agosto 1812: Tropas francesas ocupan Bilbao.

 1 septiembre 1812: Wellington sale de Madrid.

 4 septiembre 1812Tropas españolas liberan Córdoba.

17 septiembre 1812Tropas españolas liberan Granada.

19 septiembre 1812: Comienza el Sitio del Castillo de Burgos.

 1 octubre 1812: Tropas francesas toman el Castillo de Chinchilla.

22 octubre 1812: 

Fin del Sitio del Castillo de Burgos.

El pasado 1 de Septiembre el Marqués de Wellington salió de Madrid con las siete divisiones del ejército aliado para enfrentarse al ejército francés de Portugal al mando ahora del general Claussel, tras la destitución de Marmont. Los franceses partieron de Burgos a Valladolid; Wellington fue a su encuentro tras dejar tres divisiones en el Tajo; Claussel abandona la capital vallisoletana el 7 de septiembre, retirándose a Burgos.

Al ejército angloportugués se suma el español de Galicia, al mando del general Castaños. Los franceses se repliegan a Briviesca, dejando en el castillo de Burgos una guarnición de 2.000 hombres comandados por el general Dubreton. Los aliados llegan a la capital el día 18 de septiembre, poniendo sitio a la plaza con dos divisiones de infantería y 8 piezas de artillería, mientras las demás tropas se acantonan en Monasterio.

Los franceses reforzaron el castillo con algunas obras de tierra, como un hornabeque a 250 metros al norte del castillo. Wellington decide no esperar la llegada del resto de su tren de artillería y ordena un asalto sobre el hornabeque, tomado la noche del 19 al 20 de septiembre, al coste de 500 bajas aliadas; sus defensores huyen al castillo.

La noche del 22 de septiembre, Wellington ordena salvar el foso y escalar la muralla del castillo, de unos 23 pies de altura. Los franceses rechazan el asalto causando muchas bajas, y los aliados comienzan a excavar una mina desde el hornabeque. Concluida, su voladura abre una brecha que permite a los aliados ocupar el patio de armas el 4 de octubre; entonces los aliados comienzan a realizar labores de zapa contra el castillo.

Los hombres de Dubreton realizan varias salidas por sorpresa las siguientes semanas, que logran retrasar los trabajos de los zapadores ingleses y causan algunas bajas. El tiempo, lluvioso, se confabula para dificultar y ralentizar sus obras más de lo debido.

A las 16:00 horas del 18 de octubre comienza el asalto final, tras haberse abierto dos brechas. Tres columnas de soldados aliados atacan a la bayoneta trabando un duro combate cuerpo a cuerpo con los defensores, que hacen detonar las minas que habían colocado en las columnas de la iglesia de San Román, sepultando a 300 aliados; el resto de los atacantes huye en desbandada.

Para entonces, el ejército francés de Portugal se ha reorganizado, y el general Souham con 40.000 soldados acude en auxilio de los sitiados, mientras el ejército francés del rey José Bonaparte sale de Valencia marcha hacia el Tajo para reocupar Madrid. Wellington ordena levantar el cerco el 22 de octubre y replegarse a Portugal, tras haber sufrido en el frustrado asedio de Burgos unas 2.000 bajas; los franceses tuvieron 600.

23 octubre 1812: Combate de Venta del Pozo.

25 octubre 1812: Combate de Villa Muriel.

28 octubre 1812: Combate de Tordesillas.

30 octubre 1812: Combate de Puente Largo.

 2 noviembre 1812: 

José Bonaparte vuelve a Madrid.

Los franceses han conseguido reorganizar sus ejércitos en la Península Ibérica después de su derrota en Arapiles, y pasan al contraataque: el ejército de Portugal de Claussel marcha contra el ejército aliado en Castilla, mientras José Bonaparte sale de Valencia el 18 de octubre con otro ejército francés, con la intención de recuperar Madrid.

El Marqués de Wellington no puede afrontar a dos ejércitos que le superan en número y ordena un repliegue general a la seguridad de sus fuertes en Portugal. Las divisiones angloportuguesas del Tajo se retiran al oeste, y la guarnición madrileña del general Hill abandona la capital tras volar obras que puedan ser útiles a los franceses, como algunos almacenes del Retiro y la Real Fábrica de Porcelana.

Tras la salida de los ingleses el 31 de octubre hacia Alba de Tormes, el gobernador de Madrid, Don Carlos de España, se queda sin tropas suficientes para defender la capital.

Hoy entra de nuevo en Madrid el rey José Bonaparte, sin hallar ninguna oposición. El próximo día 7 de noviembre saldrá al mando de sus tropas en persecución de los angloportugueses, tras dejar una guarnición en la villa; volverá el 3 de diciembre.

Los franceses ocupan parte de España con un poderoso ejército de 230.000 soldados: Soult tiene en Andalucía a 56.000, Suchet a 60.000 en Aragón y Cataluña, Claussel a 52.000 al sur Castilla, Dorsenne a 48.000 en las Vascongadas y norte de Castilla; el rey José Bonaparte cuenta con otros 12.000 hombres en Madrid. Por contra, el ejército aliado del Marqués de Wellington cuenta sólo con unos 55.000 soldados.

Sin embargo, Napoleón, su hermano José y sus generales están en desacuerdo sobre la ocupación de España: el primero quiere anexionar a Francia el territorio al norte del Ebro, emulando la Marca Hispana de Carlomagno, el segundo pretende reinar en todo el país, pero sus generales no respetan su autoridad, tendiendo cada cual a explotar y defender la región que ocupa, mostrándose reacios a colaborar con los demás.

Debido a esta falta de coordinación, los franceses no reúnen sus tropas y realizan una ofensiva contra los aliados, a pesar de superarles en número; Wellington conoce estas desavenencias y se aprovechará de ellas en el futuro. Además, los invasores deben guardarse de unos 50.000 soldados y milicianos repartidos por la Península, apoyados de las partidas guerrilleras, con al menos otros 30.000 hombres.

17 noviembre 1812: Combate de San Muñoz.

24 noviembre 1812: 

Combate de Alba de Tormes.

El ejército aliado al mando del Marqués de Wellington se retira a Portugal desde Burgos, pasando por Torquemada, Cordobilla, Cabezón de Campos, Puente Duero, Tudela hasta llegar a Salamanca, perseguido por las avanzadillas francesas del ejército de Portugal comandado por Souham. Los angloportugueses destruyen los puentes que les puedan ser útiles a estos, con los que traban combates esporádicos.

El 18 de noviembre Wellington llega a Ciudad Rodrigo cerca de la frontera portuguesa; sus tropas tienen la moral muy baja cundiendo la indisciplina, encontrándose al borde de la insubordinación. Para cubrir su repliegue, Wellington pide al gobernador de Alba de Tormes, José Miranda Cabezón, que defienda el castillo de la localidad cuanto le sea posible, para atraer a los franceses que persiguen a su ejército.

Los desmoralizados aliados entran en Portugal, acampando al norte de la inexpugnable Línea fortificada de Torres Vedras, desplegándose de Lamego hasta las Sierras de Baños y Béjar, en Salamanca. Mientras, una avalancha de franceses se lanzan contra los muros y parapetos de Alba de Tormes.

Los salmantinos contienen a los franceses defendiendo el castillo y realizando salidas hasta la madrugada de hoy, en que el gobernador ordena evacuar la plaza, al ser insostenible por estar arruinada del fuego artillero enemigo. Quedan en ella realizando la última defensa, y protegiendo la retirada, el Teniente Nicolás Solar, con 20 soldados en pie, otros 33 heridos o enfermos; y 112 franceses prisioneros.

Al amanecer, el gobernador y los suyos entran en Carpio, y tras esquivar patrullas y unidades francesas durante tres días, llegan salvos a Pico el 28 de noviembre.

 4 diciembre 1812:

Reestructuración del Ejército Español.

Por un decreto del Consejo de Regencia de Cádiz, el ejército hispano es divido en 4 grupos principales: El del general Copóns, en Cataluña, con 16.000 soldados, el de Elío, en Murcia, con 20.000, el del Duque del Parque, en Andalucía, con 12.000 soldados sicilianos, y la reserva de 12.000 soldados que guarnecen Cádiz, al mando de O'Donell. El general Castaños unifica en Castilla a las partidas guerrilleras de Porlier, Jáurigui, Bárcenas y Mendizábal.

Arthur Wellesley, Marqués de Wellington, es nombrado Generalísimo de todos los ejércitos hispanos, en contra de los deseos de los generales españoles. Este discutirá con Castaños sobre la reorganización de las tropas españolas, sobre si sus regimientos deben tener 8 compañías de 150 soldados cada una, o 12, con 100 hombres cada una.

14 diciembre 1812: La Grande Armée se retira de Rusia.

* Consultar Retirada de Rusia.

 


Aquí finaliza esta cronología. 

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